Eslovaquia: 4 + 4

Bueno, otro nuevo formato de post: esta vez elegí cuatro aspectos de la ciudad y cuatro mini-anécdotas personales, para agregarlas todas juntas y con fotos en este post. Un mix, digamos... Veremos cómo sale.

Pequenísima ciudad (descripción)

Ahora entiendo por qué la presentan para 'day trips' desde Praga y desde Budapest. Con unas cuantas horas se puede recorrer de punta a punta. Para dar una idea, en TripAdvisor tiene 49 atracciones (no es nada). Es muy linda y vale la pena visitarla. Digamos que es visita obligada después de República Checa, porque es como su media naranja (por la ex-Checoslovaquia, vio'?). Si estás sin apuros (mi caso) pasar una noche es ideal para conocer 'lo otro' de la ciudad. Pasar dos, como yo, es demasiado.

Se puede ver la baranda de las escaleras que te llevan 'a otra época'. 

Acosado por abuelas (anécdota).

Entro a una sala de un gran edificio en el que parecía haber una exposición. Era gratis así que empiezo a caminar, mirando unas mesas en las que no había más que los mismos objetos que estaban en la casa de mi bisabuela. Después de 20 segundos siento que me tiran de la mochila (un poco violentamente). Me doy vuelta y veo a una señora mayor con bastón, que no paraba de hablarme en eslovaco, mientras me agarra del brazo y me hace retroceder, en dirección a la puerta.

'Me está echando' pienso... 'Qué habré hecho, dónde me metí!'. Mientras tanto le pedía perdón (no sé por qué) en inglés y le decía que no hablaba eslovaco. En eso, frena en un cuaderno en la entrada. Me da una birome y señala la hoja, donde había nombres y apellidos. Empiezo a escribir y vienen tres señoras más (me rodearon las cuatro). Hablaban entre todas y una me dice 'England?'. 'No, Argentina' le respondo. Para qué!?

Argentina, Argentina!! Argentina! Empezaron las cuatro, mientras una reía, otra aplaudía, la otra se frotaba las manos (típico de abuela). Yo empecé a entrar en calor y ya transpiraba frío.

- Argentina, Argentina! -dice a los gritos la que me había agarrado mientras señalaba al lado de mi nombre en el cuaderno.

Agregué 'Argentina'. Dos de ellas me acompañaron (una de cada lado) por la recorrida por la 'exposición' (un horror). Sentí como otros abuelos y abuelas hablaban atrás mío, diciendo 'Argentina' y señalándome. Ellas hablaban en eslovaco y yo decía 'great, amazing, beautiful' y en cada cosa que ellas señalaban. En 6-7 minutos recorrí todo. Les agradecí, les di un beso a cada una y me fui. Me doy vuelta a los 30 metros, y veo que tres habían salido y me miraban desde la vereda. Ante esto, mueven las manos saludándome. Les levanto el pulgar (no sé por qué me salió ese gesto) y caminé más rápido que nunca.

Iglesia azul (descripción)

El interior también es todo azul, fotos próximamente (?) en Facebook.

Esto me pareció genial. Mientras los arquitectos se pelean por ver quién construye la Iglesia con fachada más grande, antigua y espeluznante, hubo un vivo bárbaro que dijo 'hagamos una normal pero pintémosla toda de azul'. Hoy en día es la más visitada de la ciudad. Y sí, es lo distinto!

'Ay, la p*ta madre' (anécdota)

Eso fue lo que me salió cuando le estaba por sacar una foto a lo que creí que era una estatua. Mientras enfocaba, la estatua en cuestión mueve la mano y me saluda. Ahí vino mi reacción. La cosa es que era uno de los que hacen de estatuas vivientes, posando al lado del original. Me reí un poco y le saqué foto al de verdad, yéndome rápido nuevamente. Como descripción de la ciudad agrego que hay muchas de estas estatuas por la ciudad: gente sacando fotos, gente poniendo sobres el correo, gente barriendo. En fin, intentan ser originales, y logran ser simpáticos! A los turistas esas cosas nos gustan...

Este es el original. Deducirán que la gente posa tocándole el casco, no? 

Precios de occidente (descripción)

No sé si tendrá que ver con que es un país de la zona euro, pero lo noté más caro que los otros países de Europa del Este. En el supermercado no tanto porque los precios suelen ser internacionales (para los de la UE), pero por ejemplo el hostel es un parámetro: en Bratislava lo pagué 12 euros, 'caro' si lo comparo con los 7 de Praga o los 6 del de Budapest. Aunque al menos tenía desayuno!

'Ay, la p*ta madre' - Segunda parte (anécdota)

Y volví a tener esa reacción cuando en una Catedral bajé a visitar la cripta. Después de pasar por pasadizos en los que había tumbas de curas delmilquinientos y toda una onda medio tenebrosa, en el final escucho un sonido raro al pisar al lado de la pared. Miro para abajo y veo como una chapa de metal muy pesada, que buscando aventuras a lo Hollywood decido levantar. Y me encontré con eso: huesos (humanos creo) a unos pocos centímetros míos. Asustado, volví a poner la chapa y subí rápido. Los que me conocen se imaginarán que mientras volvía me di vuelta un par de veces con cara de pánico. Por las dudas.

 Los huesos en cuestión. En el momento dije 'foto para el blog', y saqué la cámara!

 Frío y noche (descripción)

La maravillosa vista desde el castillo que no me tenía que perder (11 am).

Y todavía no estamos en invierno. Sumado a que anochece muy temprano (alrededor de las 17 hs) está la muy baja temperatura (2-3 grados por la mañana). Parecía que la segunda noche iba a nevar pero finalmente la recepcionista me dijo que cayó algo de aguanieve a la madrugada, pero que incluso eso es extraño 'en la ciudad' a esta altura del año. Por lo pronto, el frío me hizo comprar guantes y usar la bufanda. Al gorro todavía le resisto (aunque lo considere el peor invento de la moda junto con la noventosa riñonera me voy a comprar uno para el peor frío).


'Qué hora es en este país?' - (anécdota)

En el desayuno de esta mañana conocí a tres mexicanos que estaban en el hostel pero en otro cuarto. Hablando, llegamos a la conclusión que íbamos para Budapest casi a la misma hora, por lo que fuimos juntos a la terminal. Los saludo y 11.05 me voy a la plataforma que decía mi pasaje (el micro salía a las 11.15). Extrañamente solo había un chino y otro más esperando. Me pongo a hablar con el chino.

'Qué raro que llegue tarde', dijimos diez minutos después. Le pedí que me mire la mochila y fui a preguntar a la oficina de tickets si la plataforma estaba bien (no había pantalla digital, solo fichas de madera increíblemente).

En el camino me encuentro con los mexicanos.

- Creo que está retrasado, voy a preguntar.
- No, son 10.25.

Miro mi reloj, 11.25
Miro mi celular, 11.25

- Pero yo tengo las 11.25 y no cambio el horario desde hace semanas -les digo, confundido.
- Mirá ese reloj -dice uno, mostrándome el de la estación.

Ya eran las 10.30 en ese momento.

- Estará bien? -dice otro mexicano.
- Por las dudas voy a preguntar -dije.

Y ahí la pregunta (qué hora es en este país?) a la vendedora. Riéndose me explica que ayer a la medianoche cambiaron el horario. Una vez más y como en todas las anécdotas de este post, me fui rápidamente a matar el tiempo con los mexicanos.